TORMO LÓPEZ, AMANDA
Cementerio integrado en una cantera
El proyecto es un cementerio contemporáneo con un recorrido descendente dividido en dos zonas: pública, para visitantes con áreas de deporte, descanso y contemplación, y privada, dedicada a los servicios del cementerio.
Sin simbología religiosa, es un espacio inclusivo para todas las creencias. Los nichos se integran en los muros y hay áreas de enterramiento en el suelo, creando un campo santo. Un lugar de paz, equilibrio y belleza, accesible al público para reflexión y descanso.

El programa contempla una zonificación clara que diferencia las áreas públicas —con espacios de contemplación, descanso y vistas— de las áreas operativas del cementerio. Esta organización permite que las funciones técnicas no interfieran con la experiencia del visitante, favoreciendo recorridos libres, accesibles y personalizados dentro de un entorno natural y respetuoso.

En puntos clave del trazado, la vegetación cumple un rol estructurante: define límites, actúa como filtro visual y organiza la transición entre zonas sin recurrir a elementos artificiales. Su presencia guía sutilmente al visitante, aportando ritmo y sensibilidad al desplazamiento.



La cantera, por su morfología, actúa como una caja de resonancia natural. En este contexto, el silencio adquiere un valor espacial significativo. Esta condición acústica ha sido respetada y potenciada, evitando introducir elementos que generen ruido visual o sonoro. Así, se preserva una atmósfera contenida, introspectiva y serena


