Se propone un Masterplan basado en el concepto de ciudad productiva y planeamiento colaborativo donde interactúan de manera conjunta los sectores privado, público y popular, para regenerar el vacío entre los microrayones 6 y 7.
El Masterplan comienza con la liberación del coche en nuestro ámbito a través de la creación de unas torres híbridas financiadas por el sector privado que contienen dentro de su programa aparcamientos. Una vez liberado nuestro ámbito de actuación, se proyecta una trama de calles peatonales cubiertas potenciando el comercio (alrededor de las torres) con viviendas-taller en hilera financiadas por el sector popular. Por último, el sector público rompe con la trama para la proyección de un edifico que
se extienda hacia el monte, albergando en su interior el programa cultural y equipamiento restante.
El sector popular propone una trama basándose en la longitud de las máquinas de riego para los cultivos para controlar el terreno . Se escoge un modelo de máquina con una con longitud de brazo de 41.10 metros y se divide el solar en bandas transversales de esa longitud y su doble, 82.20 metros.
Las intersecciones entre los distintos proyectos se solucionan de forma distinta. Por una parte, el sector privado y el popular se unen mediante un vestíbulo que hace de espacio de transición.
Por otra parte, los sectores público y popular, no se intersecan, si no que el primero está por encima del segundo.
A una escala más cercana se observan los cultivos que definen la trama del sector popular con más detalle. El sistema de riego se basa en una máquina con movimiento lateral de 41.10 m cada «span». Este sistema necesita una fuente de agua por lo que se proponen canales en los extremos para que la máquina se alimente. Asimismo, esta máquina de riego es muy eficiente para cultivos de verduras, granos, algodón…
Se plantea una tipología de viviendas de carácter dual. Mientras que el planta baja la estructura se forma con una serie de pórticos de hormigón con luces de 6.00 m, en las plantas superiores se cambia a una estructura metálica de cerchas y paneles fijos y móviles que hacen de cerramiento de fachada. Se diseña un pequeño catálogo de muebles con los que amueblar dichos pórticos. Los muebles pueden albergar espacios de almacenaje para el taller, expositores, mesas de trabajo y además, cocinas, baños, dormitorios…
La trama se divide en dos tipos de calles, las comerciales (de ancho 18 metros) que atraviesan la trama longitudinalmente y cuentan con dos alturas mas la baja y las secundarias (de ancho 16 metros) que componen la trama en el sentido transversal y cuentan con una planta sobre rasante además de la baja. En las plantas bajas se proponen puertas correderas que permitan cerrar el espacio cuando se quiera privacidad y abrirlo cuando se quiera exponer los productos…
Además, se aumenta la oferta creando un tipo de vivienda con dos dormitorios. En estos casos, la planta baja se mantiene igual con taller, pero en una de ellas, en lugar de albergar un mueble donde permanecen las escaleras, se propone un mueble que sirva como almacenaje. En la planta primera, se coge el cubículo propio y el adyacente.
Por último, la estructura cobra una gran importancia en el proyecto. Con ella se define el carácter dual de la vivienda.
